Los placeres violentos terminan en la violencia ; y tienen en su triunfo su propia muerte ; del mismo modo que se consumen el fuego y la polvora en un Beso Voraz .
Todos decimos nada. Todos nada de nada. Todos amontonados mirando el piso, todos muertos de miedo a dormir solitos, todos tenemos náuseas de amores cariados, todos rifamos besos y tragamos sapos, todos vendemos algo, todos compramos todo, todos alguna vez arruinamos todo.